En un mercado cada vez más competitivo y sobre informado, ¿Cómo llamar la atención del cliente? ¿Cómo diferenciarnos de la competencia? La mayoría de los empresarios se hacen esta pregunta continuamente, la clave está precisamente en marcar esa diferencia, aquello por lo que una empresa se diferencia del resto, algo que forma parte del branding emocional.
La marca es lo que permite esa diferenciación y es además el principal vinculo con los consumidores, no se me ocurre frase mejor para describir el concepto marca que la de Joan Costa: “La marca es lo que queda en la memoria cuando todo ha sido dicho, hecho y consumido”. La marca la crea la empresa, pero vive y se desarrolla en el cliente, en lo que éste percibe de ella, en las sensaciones que le transmite.
El branding emocional hace referencia que no sólo compramos un determinado producto porque lo necesitamos sino que escogemos uno u otro en función de lo que nos hace sentir, de esa experiencia… se establece un vínculo duradero.
Según el reputado especialista en creación de marcas, Marc Gobé, existen 10 mandamientos que debemos cumplir para elaborar estrategias de Branding Emocional efectivas: